sábado, 30 de abril de 2011

parásitos




Jamás pensé que Dios tuviera alguna forma.
Absoluta su vida; y absoluta su norma.
Ojos no tuvo nunca: mira con las estrellas.
Manos no tuvo nunca: golpea con los mares.
Lengua no tuvo nunca: habla con las centellas.
Te diré, no te asombres;
Sé que tiene parásitos: las cosas y los hombres.




viernes, 29 de abril de 2011

un buen viajero



Un buen viajero no tiene planes exactos ni intenciones de llegar.


jueves, 28 de abril de 2011

incluso después de todo este tiempo



Incluso después de todo este tiempo,

el sol no le dice
a la tierra:

“Tú me perteneces”

Mira lo que ocurre

con un amor como este:

Ilumina

todo el cielo.

miércoles, 27 de abril de 2011

no te aflijas



No te aflijas: la belleza volverá a encantarte con su gracia;
tu celda de tristeza se trocará en un jardín de rosas.
No te aflijas: tu mal será trocado en bien;
no te detengas en lo que te inquieta,
pues tu espíritu conocerá de nuevo la paz.
No te aflijas: una vez más la vida volverá a tu jardín
y pronto verás, ¡oh cantor de la noche!
una corona de rosas en tu frente.
No te aflijas si, algún día, las esferas del cosmos no giran según tus deseos,
pues la rueda del tiempo no gira siempre en el mismo sentido.
No te aflijas si, por amor,
penetras en el desierto y las espinas te hieren.
No te aflijas, alma mía,
si el torrente del tiempo arrastra tu morada mortal,
pues tienes el amor para salvarte del naufragio.
No te aflijas si el viaje es amargo,
no te aflijas si la meta es invisible.
Todos los caminos conducen a una sola meta.
No te aflijas, Hafiz, en tu rincón humilde en que te crees pobre,
abandonado a la noche oscura,
y piensa que aún te queda tu canción y tu amor.

martes, 26 de abril de 2011

el espejo humeante




Hace tres mil años había un ser humano, igual que tú y que yo, que vivía cerca de una ciudad rodeada de montañas. Este ser humano estudiaba para convertirse en un chamán, para aprender el conocimiento de sus ancestros, pero no estaba totalmente de acuerdo con todo lo que aprendía. En su corazón sentía que debía de haber algo más.

Un día, mientras dormía en una cueva, soñó que veía su propio cuerpo durmiendo. Salió de la cueva a una noche de luna llena. El cielo estaba despejado y vio una infinidad de estrellas. Entonces, algo sucedió en su interior que transformó su vida para siempre. Se miró las manos, sintió su cuerpo y oyó su propia voz que decía: «Estoy hecho de luz; estoy hecho de estrellas». Miró al cielo de nuevo y se dio cuenta de que no son las estrellas las que crean la luz, sino que es la luz la que crea las estrellas. «Todo está hecho de luz –dijo–, y el espacio de en medio no está vacío.» Y supo que todo lo que existe es un ser viviente, y que la luz es la mensajera de la vida, porque está viva y contiene toda la información.

Entonces se dio cuenta de que, aunque estaba hecho de estrellas, él no era esas estrellas. «Estoy en medio de las estrellas», pensó. Así que llamó a las estrellas el tonal y a la luz que había entre las estrellas el nagual, y supo que lo que creaba la armonía y el espacio entre ambos es la Vida o Intento. Sin Vida, el tonal y el nagual no existirían. La Vida es la fuerza de lo absoluto, lo supremo, la Creadora de todas las cosas. Esto es lo que descubrió: todo lo que existe es una manifestación del ser viviente al que llamamos Dios; todas las cosas son Dios. Y llegó a la conclusión de que la percepción humana es sólo luz que percibe luz. También se dio cuenta de que la materia es un espejo –todo es un espejo que refleja luz y crea imágenes de esa luz–, y el mundo de la ilusión, el Sueño, es tan sólo como un humo que nos impide ver lo que realmente somos. «Lo que realmente somos es puro amor, pura luz», dijo.

Este descubrimiento cambió su vida. Una vez supo lo que en verdad era, miró a su alrededor y vio a otros seres humanos y al resto de la naturaleza, y le asombró lo que vio. Se vio a sí mismo en todas las cosas: en cada ser humano, en cada animal, en cada árbol, en el agua, en la lluvia, en las nubes, en la Tierra... Y vio que la Vida mezclaba el tonal y el nagual de distintas maneras para crear millones de manifestaciones de Vida.
En esos instantes lo comprendió todo. Se sentía entusiasmado y su corazón rebosaba paz. Estaba impaciente por revelar a su gente lo que había descubierto. Pero no había palabras para explicarlo. Intentó describirlo a los demás, pero no lo entendían. Vieron que había cambiado, que algo muy bello irradiaba de sus ojos y de su voz. Comprobaron que ya no emitía juicios sobre nada ni nadie. Ya no se parecía a nadie. El los comprendía muy bien a todos, pero a él nadie lo comprendía. Creyeron que era una encarnación de Dios; al oírlo, él sonrió y dijo: «Es cierto. Soy Dios. Pero vosotros también lo sois. Todos somos iguales. Somos imágenes de luz. Somos Dios». Pero la gente seguía sin entenderlo.

Había descubierto que era un espejo para los demás, un espejo en el que podía verse a sí mismo. «Cada uno es un espejo», dijo. Se veía en todos, pero nadie se veía a sí mismo en él. Y comprendió que todos soñaban pero sin tener consciencia de ello, sin saber lo que realmente eran. No podían verse a ellos mismos en él porque había un muro de niebla o humo entre los espejos. Y ese muro de niebla estaba construido por la interpretación de las imágenes de luz: el Sueño de los seres humanos. Entonces supo que pronto olvidaría todo lo que había aprendido. Quería acordarse de todas las visiones que había tenido, así que decidió llamarse a sí mismo «Espejo Humeante» para recordar siempre que la materia es un espejo y que el humo que hay en medio es lo que nos impide saber qué somos. Y dijo: «Soy Espejo Humeante porque me veo en todos vosotros, pero no nos reconocemos mutuamente por el humo que hay entre nosotros. Ese humo es el Sueño, y el espejo eres tú, el soñador».

lunes, 25 de abril de 2011

la libertad




La búsqueda de la libertad es la única fuerza que yo conozco. Libertad de volar en ese infinito. Libertad de disolverse, de elevarse, de ser como la llama de una vela, que aun al enfrentarse a la luz de un billón de estrellas permanece intacta, porque nunca pretendió ser más de lo que es: la llama de una vela.

domingo, 24 de abril de 2011

estar herido y la voluntad de vivir





Desde el descubrimiento de Quirón en 1977, los astrólogos experimentaron y exploraron sus temas, escucharon los nuevos relatos que resuenan sobre su antiguo mito y llegaron a una cierta comprensión de su impacto arquetípico. Ahora, cerca de veinte años después, Liz Greene ve a Quirón como esencial para profundizar nuestra comprensión de la conciencia solar, pues, para elegir vivir la vida a pleno, debemos encarar esa parte nuestra que más bien busca la muerte.

La voluntad de vivir es un gran misterio. Todo médico, cualquiera sea su experiencia en enfermedades con riesgo de vida, sabe que dicha voluntad puede afectar el bienestar tanto físico como psicológico, y que la supervivencia frecuentemente depende de la voluntad de vivir del enfermo más que de los tratamientos médicos administrados. La voluntad de vivir tampoco es necesariamente lo que proclamamos sentir. Podemos proclamar que queremos vivir, pero en algún lado, dentro nuestro, queremos "ir a casa", y este anhelo de olvidar puede ser más poderoso que cualquier declaración conciente o intención de "mejorar". Algunas personas reaccionan ante el conflicto, el dolor y la desilusión, con una respuesta creativa que transforma su perspectiva y hasta su circunstancia. Otros se vuelven amargados y desesperanzados y viven en un mundo gris y tenebroso o pierden totalmente su voluntad de vivir. Entre aquellos que han renunciado internamente, no están sólo los suicidas activos, sino también aquellos arquitectos de sus propios "accidentes fatales", quienes, aún inconcientemente, están incentivados por un poderoso anhelo de llegar al final del sufrimiento y la desdicha. El comportamiento autodestructivo no siempre implica el gesto obvio de tomar un frasco de píldoras o usar un cuchillo para cortarse las venas. No existe una fórmula fácil para determinar porqué algunos individuos enfrentan los desafíos de la vida, a pesar de sufrir severos infortunios y limitaciones, mientras otros dan la espalda a su futuro, aún si la suerte los favorece. Además, no siempre, la pérdida de la voluntad de vivir puede tener como resultado la autodestrucción. Puede expresarse como el impulso de destruir a otros, como si, en un nivel profundo e inaccesible, la proyección de la desesperanza y la victimización de otros le diera, al individuo que sufre, la ilusión de que es fuerte y está controlando su vida. De esta manera, la persona que, secretamente, ha perdido la voluntad de vivir puede, en extremo, tratar de privar a los otros de la alegría -y quizás aún de la vida-encontrando una víctima propiciatoria que pueda cargar con toda la desesperación que siente dentro suyo.

El misterio puede tener su origen, como muchos misterios, en el enigma del carácter individual inherente, y la carta natal puede darnos amplia comprensión de los modelos que apuntalan ese carácter. Para cualquier polaridad que se da en la vida, nosotros, como astrólogos, siempre necesitamos buscar una polaridad entre los planetas, y ésta de esperanza versus desesperación, de la voluntad de vivir versus desesperanza, puede ser iluminada, al menos en parte, a través del simbolismo de la polaridad entre el Sol y Quirón.

No creo que podamos comprender realmente el significado de ninguno de esos planetas sin considerar el del otro. Aunque no estén realmente formando un aspecto en todas las cartas personales, no obstante, ambos están presentes en todas ellas constituyendo una energía dinámica dentro de la personalidad. Un aspecto directo agudiza esta dinámica y frecuentemente se transforma en el foco del viaje personal, pero la polaridad existe en cada uno de nosotros. Todos los planetas hasta e incluyendo a Saturno, sirven al desarrollo del ego individual, especialmente simbolizado por el Sol, de hecho, podemos aún decir que los planetas personales "sirven" al Sol como centro de la individualidad. Pero Quirón yace en la interfase entre Saturno y los planetas exteriores, por eso mediatiza las cuestiones colectivas que impactan y hieren al individuo. Por su naturaleza, la implicancia colectiva de Quirón, significa algo colectivamente "no cicatrizable" porque la herida existe en lo colectivo y es ancestral. Por su naturaleza, el Sol refleja el sentido de finalidad y significado de vida de cada individuo, y éstos están íntimamente ligados a la voluntad de vivir y de llegar a ser uno mismo. Cada uno de estos planetas necesita al otro, pero si la balanza se inclina mucho para un lado o para el otro, pueden sobrevenir ciertos problemas psicológicos.

El significado del Sol
No perderé tiempo en describir el significado del Sol pues ya lo he hecho ampliamente en varias oportunidades. En resumen, el Sol representa la esencia de la divinidad individual viviente(o, si se prefiere, un término menos "espiritual", el impulso vital), encarnado en una forma humana, con los límites de una vida individual y que se expresa a sí mismo con una naturaleza y propósito específico. A través del Sol nos experimentamos como únicos, especiales y nacidos con algo para aportar a la vida. Para parafrasear lo expresado por Charles Harvey en una conferencia, el Sol, dentro nuestro, hace que nos conectemos con el macrocosmos y nos experimentemos como parte de algo eterno. Esta experiencia interna nos transmite, no "felicidad" en el sentido coloquial ordinario, sino una profunda serenidad y esperanza que surge del sentimiento de vivir una vida útil y significativa. Podemos llamar a esto una experiencia de "destino individual", porque el Sol refleja aquella parte nuestra que sabe que estamos aquí para concretar un propósito específico. Apolo fue, en el mito griego, el dios que disipaba la oscuridad de la maldición familiar y liberaba al individuo de las ataduras de un "pecado" ancestral. El sentido del significado y propósito individuales puede verdaderamente liberarnos del sentimiento de estar atrapados en el pasado familiar. El Sol también nos da un sentido de futuro individual, confianza en nuestro propósito y la convicción interna de que estamos "yendo a algún lado". Es el Sol el que nos permite pelear, para liberarnos a su vez del sentimiento de futilidad e inutilidad, y el que afirma nuestro valor único aún si nuestras circunstancias son penosas.

La experiencia interna de destino, significado y esperanza individuales nos brinda, a su vez, auto-confianza y una creencia en la bondad esencial de la vida, y esto puede ser una poderosa fuerza curativa tanto a nivel físico como psicológico. Si la expresión del Sol está bloqueada, ahogada, o poco desarrollada por alguna razón, -por heridas infantiles, por ejemplo, o por conflictos internos reflejados en la carta- a la persona le resulta muy difícil sentir que tiene el derecho a estar viva por sí misma. Las dificultades de la vida pueden, entonces, amplificarse porque no hay sensación interna de ser especial ni esperanza de la cual nutrirse. En la carta, el poder de creación depende del Sol porque cuando creamos algo, nos entregamos a algún "otro", dentro nuestro, al cual le confiamos que traerá buenos frutos. La creatividad requiere un acto de confianza. También el juego, donde nos entregamos al fluir del poder imaginativo que nos hace sentir alegres. El símbolo más antiguo de este poder solar, creativo y juguetón, es la imagen del niño divino, que personifica lo eternamente joven e indestructible dentro nuestro.

El significado de Quirón
En el arte grecorromano, Quirón es siempre representado llevando un niño sobre sus espaldas. Pero a pesar de este emblema de esperanza, la figura del Rey de los Centauros es trágica. Vale la pena reiterar el mito, que es frecuentemente distorsionado o mal relatado por ser tan penoso. En el mito, Quirón no se vuelve un curador por haber sido herido.
Esa es una reinterpretación optimista que intenta darle un sentido al dolor de la vida asignándole un significado y propósito específicos: desarrollar la compasión y la sabiduría para curar a otros a raíz de nuestro propio dolor. Esta reinterpretación del mito es válida como una forma de trabajar con las heridas propias. Pero el dolor de Quirón no servía a tan nobles propósitos en el relato verdadero. El ya era maestro y curador antes de ser herido. Podría inferirse que él ya está herido porque sufre de aislamiento, aunque es un Centauro, y por lo tanto, miembro de la tribu de criaturas que simbolizan el poder del instinto natural, él es en sí mismo civilizado, y esto mismo es lo que lo separa de su tribu. Quirón, en este contexto, representa al animal sabio, el poder natural que por su propia voluntad ha escogido servir a la evolución y a la conciencia humanas, más que permanecer ciegamente sujeto a las compulsiones instintivas del reino animal. Como el "animal que ayuda" de los cuentos de hadas, Quirón vuelve su espalda al salvajismo de su naturaleza instintiva para servir al modelo evolutivo, el cual considera es el camino a seguir para la totalidad de la vida.
Pero Quirón está en el lugar y momento equivocados. Es atrapado entre Hércules, el héroe solar que personifica la fuerza del ego humano, y los salvajes e indómitos Centauros a quienes Quirón mismo ha dejado atrás. Quirón no toma partido durante la encarnizada batalla, pues él simpatiza con los dos. Quizá, por este rol mediador, que lo ha privado de su agresión natural, es accidentalmente herido por una flecha envenenada apuntada a otro Centauro; y la herida no sana, no importa cuál sea el método curativo que le aplique. Finalmente se retira a su caverna, aullando de angustia, rogando morir. Zeus y Prometeo se apiadan de él y le conceden la gracia de la mortalidad, permitiéndole morir en paz como cualquier mortal, a pesar de haber sido un dios.
Este terrible relato implica una condición de injusticia en la vida que es dura de aceptar para cualquiera, y quizá aún más para los individuos idealistas involucrados en estudios tales como la astrología. Queremos creer que la vida es justa, que la bondad es premiada y la vileza castigada, por lo menos en alguna otra encarnación si no lo es en ésta. Aquí hay una criatura buena que sufre por una falta que no le pertenece, una víctima de la inevitable batalla entre la evolución y la inercia, entre la conciencia y el instinto ciego. Quirón es una imagen de aquello que ha sido herido en nosotros injustamente por la vida, y por condiciones ineludibles que reflejan frustraciones e imperfecciones en la psiquis colectiva que es infaliblemente tosca en sus esfuerzos por progresar. A raíz de que los seres humanos somos tanto héroes solares como animales salvajes, y de que nuestros esfuerzos por civilizarnos a nosotros mismos produjeron, a lo largo de la historia, resultados desastrosos, tenemos un legado de dolor infligido injustamente, que repercute a través de generaciones. Los daños físicos y psíquicos, cuyas causas yacen, no en el fracaso individual o aún familiar, sino en una herencia genética o desastres colectivos como el Holocausto o la pesadilla actual en Kosovo, pertenecen al reino de Quirón. En estas esferas nuestros esfuerzos individuales inflamados por el Sol, refinados y concentrados por los planetas interiores y a los que da forma y fortaleza Saturno, son desbaratados o dañados por fuerzas de la vida, la historia, la sociedad, y la psiquis colectiva, sobre las cuales no tenemos control y por las cuales, como individuos, no podemos ser culpados.
Semejante choque con las inevitables imperfecciones de lo colectivo pueden dejarnos llenos de amargura y cinismo. Podemos castigar a otros porque nos sentimos mutilados, heridos e irredimibles. O podemos castigarnos a nosotros mismos. Pero si logramos avanzar más allá de la negra bilis de la amargura, y si somos lo suficientemente persistentes en la búsqueda de respuestas, podemos por cierto, hallar una respuesta; aún si la respuesta es que no hay respuesta, y que debemos aceptar los límites de la existencia mortal. La aceptación es uno de los regalos de Quirón, y es diferente a la resignación autocompasiva. La gracia de la muerte, obtenida por Quirón, puede comprenderse como un símbolo de la aceptación de la mortalidad, y constituye una transformación que, aún si no puede curar lo incurable o alterar el pasado, puede cambiar radicalmente nuestra perspectiva de la vida. A través suyo aprendemos compasión, aunque de una clase limitada. La compasión de Quirón es la compasión de un cojo por el otro. Podemos sentir una profunda empatía por aquellos que han sido heridos como nosotros, pero sin el calor y la luz del Sol, tal vez no encontremos la generosidad para movernos más allá del círculo estrecho de aquellos cuya aflicción específica refleje la nuestra, y ver que la vida nos ha lastimado a todos, de una u otra manera.

Quirón como víctima propiciatoria: el herido se transforma en agresor
Hay muchas etapas en el proceso que representa Quirón, comenzando por su herida y terminando con su transformación en un ser mortal y el alivio de su sufrimiento. Estas etapas encierran rabia, furia, el deseo de lastimar a otros, amarga resignación, autocompasión, sentimiento de victimización, y finalmente, la aparición del deseo de comprender los patrones universales que yacen más allá del dolor personal. Si en cualquiera de estas etapas fallamos en enfrentar lo que nos está pasando, podemos quedarnos fijados en el rol de victimario y actuar alguno de los rasgos menos atractivos de Quirón. Quirón es, después de todo, herido en su mitad animal, y los animales no se caracterizan por su actitud filosófica cuando son heridos. Aquellos que tienen el vigor necesario tienden a morder a su vez.

Lucha y síntesis
El psicoanalista Michael Balint escribió que en el núcleo de toda enfermedad, tanto física como psicológica, hay una herida fundamental, una lucha o conflicto interno que parece insuperable y que puede generar amargura, rabia y la pérdida de la voluntad de vivir. No hay en esta afirmación ninguna implicancia de culpabilidad individual, sino más bien la sugerencia de que si el conflicto puede traerse a la conciencia, hay una buena chance de que el curso de numerosas enfermedades físicas y psicológicas pueda ser alterado o enfrentado con un espíritu diferente y más positivo.
Si Quirón trabaja contra o abruma al Sol, el resultado puede ser la depresión, pérdida de confianza y una sensación de daño o herida permanente. Uno se vuelve cínico, como dice Mefistófeles de Goethe "Soy el espíritu de la negación". Uno espera el fracaso y, porque lo espera, probablemente lo encuentre. La sensación de ser victimizado o de ser el chivo expiatorio puede ser muy intensa; o podemos proyectar el estar herido en otros y victimizarlos o tomarlos como víctimas propiciatorias. Si caemos en desconocer nuestra sensación interna de amargura y de estar heridos, podemos volvernos arrogantes y subirnos al caballo de nuestro grandioso logro espiritual, mirando por encima del hombro a aquellos que juzgamos están menos evolucionados que nosotros. También podemos volvernos intolerantes y hasta crueles con aquellos que inadvertidamente nos recuerdan que estamos lastimados. Y así la herida se mantiene abierta en la oscuridad.

Sin embargo, la imagen grecorromana de Quirón cargando al niño divino en sus espaldas, nos habla también de que estos dos símbolos antitéticos pueden trabajar juntos. En el mito, Quirón es el maestro del niño, aquél al que se le confiaba el cuidado y la educación del príncipe que llegaría a ser rey. Esta es una imagen rica y esperanzadora del rol que nuestro incurable mal puede jugar en la educación de la persona en la que estamos en camino de convertirnos. Somos capaces de encontrar una cualidad de serenidad y sabiduría que emerge de la paciencia con que afrontamos aquello que no puede cambiarse. También podemos desarrollar fortaleza y firmeza, y perder el sentimentalismo que hace de tantos idealistas personas totalmente ineficaces para alcanzar sus sueños. Además podemos vislumbrar los modelos más amplios, más profundos: la lenta y dolorosa evolución de lo colectivo, del cual somos parte, y con el que debemos compartir responsabilidades. Los errores y desastres colectivos no son "sus" errores, la suciedad humana nos pertenece a todos.

La melancolía que Quirón puede generar, entibiada por la luz del Sol, también puede llevarnos a tener profundidad de pensamientos y sentimientos y a movilizar en nosotros la determinación de contribuir al bienestar de los demás. Podemos encontrar una clase diferente de compasión, no sólo por aquellos que han sido lastimados de la misma forma que nosotros, sino por gente cuya experiencia no se iguala necesariamente a la nuestra, pero que, sin embargo, merecen compasión por el sólo hecho de que todos somos seres humanos. Si uno ha perdido un ojo, es fácil sentir simpatía por los tuertos como nosotros y odiar a aquellos que son lo suficientemente afortunados como para disfrutar de una visión completa. El Sol trabajando con Quirón puede engendrar suficiente generosidad de espíritu como para reconocer que todos los seres humanos sufren por el sólo hecho de estar solos y de ser mortales, y que esa herida específica no es mas "especial" o más merecedora de compasión que otras.

El Sol y Quirón en aspectos directos
A aquellos que tienen un aspecto directo entre el Sol y Quirón les es posible conocer, en un nivel profundo, cómo la injusticia de la vida puede dañar el espíritu, y si son capaces de tomar el desafío de esta combinación de planetas, pueden también dedicar su considerable energía y fortaleza a dejar el mundo como un lugar mucho mejor de lo que era cuando llegaron a él.

Los aspectos entre el Sol y Quirón no garantizan una solución servida en bandeja. Muchas personas no encuentran su camino para resolverlo. Sin embargo, aunque constituyen un profundo desafío, estos contactos son capaces también de transmitir una forma especial de traer a la conciencia las heridas y de enseñar esta forma a otros. Los aspectos difíciles entre los dos sin duda contribuyeron a que Jung (Sol en Leo fuera de signo en cuadratura con Quirón en Aries) formulara una psicología de lo colectivo y quizá también, llevaron a Dane Rudhyar (Sol en Aries en oposición a Quirón en Libra) a desarrollar una astrología antropo-céntrica que sirviera de herramienta para penetrar e iluminar, más que para el mero pronóstico. No hay duda de que ambos hombres sufrieron y ambos, en ocasiones, mostraron el lado menos atractivo del Centauro herido; no me hubiera gustado estar casada con ninguno de ellos. Pero ellos transformaron sus heridas en poder creativo y compartieron el don del mítico Centauro de enseñar y curar. ¿Cómo llegaron ahí?

La casa y el signo en el que Quirón está ubicado nos dice mucho acerca de dónde y cómo la vida nos ha herido. Este es el lugar donde, no importa cuan arduamente pretendamos buscar un objeto específico para culpar, eventualmente descubriremos que las culpas yacen en la brecha entre el ideal y la realidad y en la inevitable imperfección de la naturaleza humana. Podemos necesitar protestar contra la vida, pero si no queremos caer en una amargura corrosiva que finalmente nos deforme y enferme, necesitamos movernos más allá de la fase del furor de Quirón para adentrarnos en la búsqueda de aquello que nos lleva más allá de la identificación con el chivo expiatorio y la víctima, y más allá de la concomitante inclinación a jugar el rol de la víctima propiciatoria. Esta comprensión requiere una dispensa de la convicción espiritual y moral previa, y encontrar una base más amplia desde la cual mirar la vida. Podemos necesitar renunciar a la idea de que los buenos siempre montan caballos blancos y los malos caballos negros y, debemos ser capaces también, de aceptar el hecho de que a veces gente buena y decente sufre injustamente y que gente desagradable y repugnante se las arregla muy bien y muere en sus ricas y confortables camas, a gusto consigo mismos. Quirón y Walt Disney no son una buena pareja de amantes.

¿Cómo encontramos este tipo de comprensión? ¿Cómo aprendemos a tolerar y perdonar genuinamente sin ese superior y auto-satisfactorio "pon la otra mejilla" que enmascara un resentimiento y una rabia profundamente inconcientes? Quirón necesita del Sol para esta tarea. El Sol tiene el poder de afirmar la particularidad y bondad del individuo y, sólo esto, puede contrarrestar el veneno de la auto-compasión. La casa y el signo en el que está ubicado el Sol en la carta natal, reflejan aquello en lo que necesitamos transformarnos, si deseamos sentirnos verdaderamente vivos. Si el Sol está en Aries en la 5° casa y estamos ocupados sacrificándonos y dedicando nuestra vida a los demás, entonces en algún lugar algo no está funcionando, y una profunda deslealtad con uno mismo puede estimular la amargura de Quirón. Si el Sol está en Sagitario en la 1° casa y estamos ocupados fingiendo que no queremos que nadie se fije en nosotros, entonces en alguna parte algo no está funcionando. Si el Sol está en la 10° casa en Tauro y proclamamos no estar interesados en la seguridad material ni en el reconocimiento social de nuestros talentos, en algún lugar algo no está funcionando. Si el Sol está en 12° casa en Cáncer y nos esmeramos en fingir que no creemos en una dimensión mística e invisible de la vida, psicológica o espiritual, entonces en algún lugar algo no está funcionando bien. Creo que necesitamos preguntarnos a nosotros mismos: ¿Está brillando el Sol en mi vida? ¿Soy yo mismo? ¿O es el miedo a la soledad, a la no pertenencia lo que me hace fingir ser lo que no soy?
Igualmente creo que debemos ponernos frente a Quirón y preguntarnos: ¿Cuál es la naturaleza de mi herida? ¿Cómo me ha lastimado la vida y a quién culpo secretamente? ¿Qué estoy haciendo para compensar, negar, ser indulgente, o proyectar esta herida? ¿Puedo sentir compasión por mí mismo o sólo rabia y auto-compasión? ¿Dónde me siento el chivo expiatorio y dónde trato de curar o destruir a otros para convencerme de que no estoy herido? ¿Dónde me saboteo y hasta me destruyo por causa de mi amargura? Para que el Sol y Quirón trabajen juntos, debemos ser concientes de los dos. Hay una profunda y misteriosa química entre los dos planetas que, si está trabajando para nosotros mas que en contra nuestra, parece movilizar la fuerza de la vida, no sólo para nuestra propia expresión, sino también para la sociedad de la que formamos parte. La alienación y el daño de Quirón impiden que el Sol se transforme en arrogante e insensible; el calor y la alegría del Sol protegen a Quirón de la desesperación. Como con todos los elementos de la carta, el grado en el que estas dimensiones de nuestra alma nos dan lo mejor de sí, depende de cuán concientes somos de su realidad dentro nuestro. Esta no es una cura para toda la vida. La vida nos seguirá lastimando de tiempo en tiempo, de una manera u otra, y las heridas de Quirón, aunque hayamos podido hacer las pases con ellas, inevitablemente nos roban la inocencia. La voluntad de vivir no se moviliza por la creencia de que la vida es color de rosa, de que todo lo que necesitamos es amor y de que alguna clase de dios-padre-madre, nos recompensará si somos buenos. Está constituida por una materia muy dura y necesita realismo, tanto como fe y fantasía, si es que vamos a dejar esta existencia con la sensación de haber utilizado al máximo el don de la vida, que hemos recibido, por más efímero que sea.

sábado, 23 de abril de 2011

tú que te sientes a salvo en una meseta firme y segura




Tú que te sientes a salvo en una meseta firme y segura
Que no ves que el verano da paso al invierno?
Que la Luna llena da paso a la menguante?
Que después de la lluvia, viene la aridez
Que la vida es el camino a la muerte,
y para morir solo se necesta haber nacido?
Tonto que te engañas tratando de detener los ciclos
Porque todo es movimiento.
Que sea esto un consuelo para los que estan en arenas movedizas.
Sufriendo de frío bajo la oscuridad de la Luna
Muerto de sed en medio del desierto
Para renacer solo se necesita morir
Este ciclo también pasará
Porque todo es movimiento.

viernes, 22 de abril de 2011

cuando una mujer ha recobrado su naturaleza sabia



Cuando una mujer ha recobrado su naturaleza sabia o inteligente, es al mismo tiempo amiga y madre de todas las que se han extraviado, de todas las que necesitan aprender, de todas las que tienen un enigma que resolver, de todas las que andan vagando y buscando.

miércoles, 20 de abril de 2011

por un extraño motivo



Por un extraño motivo, en una buena biblioteca, te sientes como si estuvieras absorbiendo la sabiduría contenida en todos esos libros, sin abrir siquiera uno de ellos.

martes, 19 de abril de 2011

no hay ni felicidad ni infelicidad en este mundo



No hay ni felicidad ni infelicidad en este mundo, sólo existe la comparación de un estado a otro. Sólo un hombre que ha sentido la desesperación final es capaz de sentir la felicidad definitiva. Es necesario haber deseado la muerte para saber que es vivir. La suma de toda sabiduría humana se incluye en estas dos palabras: espera y esperanza.

lunes, 18 de abril de 2011

cuando 
mires, hazlo con amor




Hace dos años, escuche hablar de un terapeuta en Hawaii quien curó 
un pabellón completo de pacientes criminales insanos sin siquiera 
ver a ninguno de ellos. El psicólogo estudiaba la ficha del recluso 
y luego miraba dentro de si mismo para ver cómo él había creado la 
enfermedad de esa persona. En la medida en que el mejoraba, el 
paciente se mejoraba. 


La primera vez que escuche hablar de esta historia, pensé que era 
una leyenda urbana. ¿Como podía cualquiera curar a otro con solo 
curarse a si mismo? ¿Como podía aunque fuera el maestro de mayor 
poder de auto curación curar a alguien criminalmente insano? No 
tenia ningún sentido, no era lógico, de modo que descarte esta 
historia. 


Sin embargo, la escuche nuevamente un año después. Escuché que el 
terapeuta había usado un proceso de sanación Hawaiano llamado 
“hoponopono”.

Nunca había oído hablar de ello, sin embargo no podía 
sacarlo de mi mente. Si la historia era totalmente cierta, yo tenía 
que saber más. Siempre había entendido que “total responsabilidad” 
significaba que yo soy responsable de lo que pienso y hago. Lo que 
esté mas allá, está fuera de mis manos. Pienso que la mayor parte 
de la gente piensa igual sobre la responsabilidad. Somos 
responsables de lo que hacemos, no de lo que los otros hacen – pero 
eso está equivocado. 

El terapeuta Hawaiano que sanó a esas personas mentalmente enfermas 
me enseñaría una nueva perspectiva avanzada sobre lo que es la 
total responsabilidad. Su nombre es Dr. Ihaleakala Hew Len. 


Probablemente hayamos pasado una hora hablando en nuestra primera 
conversación telefónica. Le pedí que me contara la historia total 
de su trabajo como terapeuta.

 Él explicó que había trabajado en el Hospital Estatal de Hawai 
durante cuatro años. El pabellón donde encerraban a los locos 
criminales era peligroso.
 Por regla general los psicólogos renunciaban al mes de trabajar 
allí. La mayor parte de los miembros del personal allí caían 
enfermos o simplemente renunciaban. La gente que atravesaba ese 
pabellón simplemente caminaba con sus espaldas contra la pared, 
temerosos de ser atacados por sus pacientes. No era un lugar 
placentero para vivir, ni para trabajar ni para visitar.

 El Dr. Len me dijo que el nunca vio a los pacientes. Firmo un 
acuerdo de tener una oficina y revisar sus legajos. Mientras miraba 
esos legajos, el trabajaría sobre si mismo. Mientras el trabajaba 
sobre si mismo, los pacientes comenzaban a curarse.
 Luego de unos pocos meses, a los pacientes que debían estar 
encadenados se les permitía caminar libremente, me dijo. Otros que 
tenían que estar fuertemente medicados, comenzaban a mermar su 
medicación. Y aquellos que no tenían jamás, ninguna posibilidad de 
ser liberados, fueron dados de alta. Yo estaba asombrado. No solamente eso, continuó, sino que el personal comenzó a gozar 
yendo a trabajar. El ausentismo y los cambios de personal desaparecieron. Terminamos 
con más personal del que necesitábamos porque los pacientes eran 
liberados y todo el personal venia a trabajar. Hoy ese pabellón 
esta cerrado. 

Aquí es donde yo tuve que hacer la pregunta del millón de dólares: 
¿Qué estuvo haciendo usted con usted mismo que ocasionó que esas 
personas cambiaran? Yo simplemente estaba sanando la parte de mi que los había creado 
a ellos, dijo él. Yo no entendí. El Dr. Len explico que entendía 
que la total responsabilidad de tu vida implica a todo lo que está 
en tu vida, simplemente porque está en tu vida, y por ello es tu 
responsabilidad. En un sentido literal, todo el mundo es tu 
creación.


¡Uau! Esto es duro de tragar. Ser responsable por lo que yo hago o 
digo es una cosa. Ser responsable por lo que cualquiera que esté en 
mi vida hace o dice es otra muy distinta. Sin embargo la verdad es 
esta: si asumes completa responsabilidad por tu vida, entonces todo 
lo que ves, escuchas, saboreas, tocas o experimentas de cualquier 
forma es tu responsabilidad porque ésta en tu vida. Esto significa 
que la actividad terrorista, el presidente, la economía o cualquier 
cosa que experimentas y no te gusta, esta allí para que tu la 
sanes. Ello no existe, por decirlo así, excepto como proyecciones 
que salen de tu interior. El problema no está con ellos, está en 
ti, y para cambiarlo, debes cambiar tú.

 Se que esto es difícil de captar, mucho menos de aceptar o de 
vivirlo realmente. Achacar a otro la culpa es mucho más fácil que 
asumir la total responsabilidad, pero mientras hablaba con el Dr. 
Len, comencé a comprender esa sanación de él y que el ho’oponopono 
significa amarte a ti mismo. 

Si deseas mejorar tu vida, debes sanar tu vida. Si deseas curar a 
cualquiera, aún a un criminal mentalmente enfermo, lo haces 
curándote tu mismo.

 Le pregunte al Dr. Len como se curaba a si mismo. Qué era lo que él 
hacía exactamente cuando miraba los legajos de esos pacientes.

 Yo simplemente permanecía diciendo ‘Lo siento’ y ‘Te amo’, una y 
otra vez” explicó él.

 ¿Sólo eso? Sólo eso. Resulta que amarte a ti mismo es la mejor forma de mejorarte a ti 
mismo, y mientras tú te mejoras a ti mismo, mejoras tu mundo. 

Permíteme darte un rápido ejemplo de como funciona esto: un día, 
alguien me envía un e-mail que me desequilibra. En el pasado lo 
hubiera manejado trabajando sobre mis aspectos emocionales tórridos 
o tratando de razonar con la persona que envió ese mensaje 
detestable. Esta vez yo decidí probar el método el Dr. Len. Me puse 
a pronunciar silenciosamente “lo siento” y “te amo”. No lo decía a 
nadie en particular. Simplemente estaba invocando el espíritu del 
amor para sanar, dentro de mi lo que estaba creando la 
circunstancia externa.


 En el término de una hora recibí un email de la misma persona. Se 
disculpaba por su mensaje previo. Ten en cuenta que yo no realicé 
ninguna acción externa para lograr esa disculpa. Yo ni siquiera 
contesté su mensaje. Sin embargo, sólo diciendo “te amo”, de algún 
modo sané dentro de mí lo que estaba creando en él.


Mas tarde asistí a un taller de ho’oponopono dirigido por el Dr. 
Len. Él tiene ahora 70 años de edad, es considerado un chaman 
abuelo y es algo solitario. 

El alabó mi libro El Factor Atractivo. Me dijo que mientras yo me 
mejoro a mi mismo, la vibración de mi libro aumentará y todos lo 
sentirán cuando lo lean. En resumen, a medida que yo me mejoro, mis 
lectores mejorarán.

“¿Y qué pasara con los libros que ya he vendido y han salido de 
mi?” pregunté.


 Ellos no han salido explicó él, una vez más soplando mi mente con 
su sabiduría mística. “Ellos aún están dentro de ti”. En resumen, 
no hay afuera. Me llevaría un libro entero explicar esta técnica 
avanzada con la profundidad que ella merece.


Basta decir que cuando quiera que desees mejorar cualquier cosa en 
tu vida, hay solo un lugar adonde buscar: dentro de ti. Cuando 
mires, hazlo con amor.


domingo, 17 de abril de 2011

tu tarea no consiste en buscar el amor



Tu tarea no consiste en buscar el amor. Tu tarea se limita a buscar y encontrar todas las barreras dentro de ti mismo y que has construido en su contra.

sábado, 16 de abril de 2011

dentro de mí todas las cosas están ahí




Tierra, Agua, Fuego, Aire
Dentro de mí todas las cosas están ahí
Carne de mis huesos es como la Tierra
Es suave pero fuerte y lleno de valor
La sangre que fluye dentro de mis venas
Es como el mar, el río y la lluvia
Mi espíritu se dispara y me lleva a ser superior
Aquí es donde guardar mi fuego
Mi aliento y pensamientos son como el aire
Todo puedo sin ir a ninguna parte y
Tierra, Agua, Fuego y Aire
Dentro de mí todas las cosas están ahí.

viernes, 15 de abril de 2011

for everything you have missed





For everything you have missed, you have gained something else, and for everything you gain, you lose something else.

Por todo lo que has perdido, has ganado algo más, y por cada cosa que ganas, pierdes algo más.



jueves, 14 de abril de 2011

al otro lado del río





Clavo mi remo en el agua
Llevo tu remo en el mío
Creo que he visto una luz al otro lado del río

El día le irá pudiendo poco a poco al frío
Creo que he visto una luz al otro lado del río

Sobre todo creo que no todo está perdido
Tanta lágrima, tanta lágrima y yo, soy un vaso vacío

Oigo una voz que me llama casi un suspiro
Rema, rema, rema
Rema, rema, rema

En esta orilla del mundo lo que no es presa es baldío
Creo que he visto una luz al otro lado del río

Yo muy serio voy remando muy adentro sonrío
Creo que he visto una luz al otro lado del río

Sobre todo creo que no todo está perdido
Tanta lágrima, tanta lágrima y yo, soy un vaso vacío

Oigo una voz que me llama casi un suspiro
Rema, rema, rema
Rema, rema, rema

Clavo mi remo en el agua
Llevo tu remo en el mío
Creo que he visto una luz al otro lado del río

miércoles, 13 de abril de 2011

zona de promesas




Mamá sabe bien

perdí una batalla

quiero regresar

sólo a besarla



No está mal ser mi dueño otra vez

ni temer que el río sangre y calme

al contarle mis plegarias



Tarda en llegar

y al final

al final hay recompensa



Mamá sabe bien

pequeña princesa

cuando regresé

todo quemaba



No está mal sumergirme otra vez

ni temer que el río sangre y calme

sé bucear en silencio



Tarda en llegar

y al final

al final hay recompensa



Tarda en llegar
y al final

al final hay recompensa

en la zona de promesas.


martes, 12 de abril de 2011

compasión



Compasión, la más elevada de las virtudes, que es mezcla de amor, alegría, tolerancia, perdón, agradecimiento, honradez, paciencia y preocupación por los demás.


lunes, 11 de abril de 2011

la gente que me gusta




Me gusta la gente que vibra, que no hay que empujarla, que no hay que decirle que haga las cosas, sino que sabe lo que hay que hacer y que lo hace. La gente que cultiva sus sueños hasta que esos sueños se apoderan de su propia realidad. Me gusta la gente con capacidad para asumir las consecuencias de sus acciones, la gente que arriesga lo cierto por lo incierto para ir detrás de un sueño, quien se permite huir de los consejos sensatos dejando las soluciones en manos de nuestro padre Dios.
Me gusta la gente que es justa con su gente y consigo misma, la gente que agradece el nuevo día, las cosas buenas que existen en su vida, que vive cada hora con buen ánimo dando lo mejor de sí, agradecido de estar vivo, de poder regalar sonrisas, de ofrecer sus manos y ayudar generosamente sin esperar nada a cambio.
Me gusta la gente capaz de criticarme constructivamente y de frente, pero sin lastimarme ni herirme. La gente que tiene tacto.
Me gusta la gente que posee sentido de la justicia.
A estos los llamo mis amigos.
Me gusta la gente que sabe la importancia de la alegría y la predica. La gente que mediante bromas nos enseña a concebir la vida con humor. La gente que nunca deja de ser aniñada.
Me gusta la gente que con su energía, contagia.
Me gusta la gente sincera y franca, capaz de oponerse con argumentos razonables a las decisiones de cualquiera.
Me gusta la gente fiel y persistente, que no desfallece cuando de alcanzar objetivos e ideas se trata.
Me gusta la gente de criterio, la que no se avergüenza en reconocer que se equivocó o que no sabe algo. La gente que, al aceptar sus errores, se esfuerza genuinamente por no volver a cometerlos.
La gente que lucha contra adversidades.
Me gusta la gente que busca soluciones.
Me gusta la gente que piensa y medita internamente. La gente que valora a sus semejantes no por un estereotipo social ni cómo lucen. La gente que no juzga ni deja que otros juzguen.
Me gusta la gente que tiene personalidad.
Me gusta la gente capaz de entender que el mayor error del ser humano, es intentar sacarse de la cabeza aquello que no sale del corazón.
La sensibilidad, el coraje, la solidaridad, la bondad, el respeto, la tranquilidad, los valores, la alegría, la humildad, la fe, la felicidad, el tacto, la confianza, la esperanza, el agradecimiento, la sabiduría, los sueños, el arrepentimiento y el amor para los demás y propio son cosas fundamentales para llamarse gente.
Con gente como ésa, me comprometo para lo que sea por el resto de mi vida, ya que por tenerlos junto a mí, me doy por bien retribuido.

domingo, 10 de abril de 2011

sé discreto, preserva tu vida íntima



Sé discreto, preserva tu vida íntima, de esta manera te liberas de la opinión de los otros y llevarás una vida tranquila volviéndote invisible, misterioso, indefinible e insondable como el Tao. No compitas con los demás, vuélvete como la tierra que nos nutre que nos da de lo que necesitamos. Ayuda a los otros a percibir sus cualidades, sus virtudes y a brillar. El espíritu competitivo hace que crezca el ego y crea conflictos inevitablemente. Ten confianza en ti mismo, preserva tu paz interna evitando entrar en la provocación y en las trampas de los otros.

No te comprometas fácilmente. Si actúas de manera precipitada sin tomar consciencia profundamente de la situación te vas a crear complicaciones. La gente no tiene confianza en aquellos que dicen sí muy fácilmente porque saben que ese famoso sí no es sólido y le falta valor. Toma un momento de silencio interno para considerar todo lo que se presenta y toma tu decisión después. Así desarrollarás la confianza en ti mismo y la sabiduría. Si realmente hay algo que no sabes o que no tienes la respuesta a la pregunta que te han hecho, acéptalo. El hecho de no saber es muy incómodo para el ego porque le gusta saber todo, siempre tener razón y siempre dar su opinión muy personal. En realidad el ego no sabe nada, simplemente hace ver que sabe.
Evita el hecho de juzgar y de criticar, el Tao es imparcial y sin juicios, no critica a la gente, tiene una compasión infinita y no conoce la dualidad. Cada vez que juzgas a alguien lo único que haces es expresar tu opinión muy personal, y es una pérdida de energía, es puro ruido. Juzgar es una manera de esconder sus propias debilidades. El sabio tolera todo y no dirá ni una palabra.

Recuerda que todo lo que te molesta de los otros es una proyección de todo lo que todavía no has resulto de ti mismo. Deja que cada quien resuelva sus propios problemas y concentra tu energía en tu propia vida. Ocúpate de ti mismo, no te defiendas. Cuando tratas de defenderte en realidad estás dándole demasiada importancia a las palabras de los otros y le das más fuerza a su agresión. Si aceptas el no defenderte estás mostrando que las opiniones de los demás no te afectan, que son simplemente opiniones y que no necesitas convencer a los otros para ser feliz. Tu silencio interno te vuelve impasible. Haz regularmente un ayuno de la palabra para volver a educar al ego que tiene la mala costumbre de hablar todo el tiempo. Practica el arte de no hablar. Toma un día a la semana para abstenerte de hablar. O por lo menos algunas horas en el día según lo permita tu organización personal. Este es un ejercicio excelente para conocer y aprender el universo del Tao ilimitado en lugar de tratar de explicar con las palabras qué es el Tao. Progresivamente desarrollarás el arte de hablar sin hablar y tu verdadera naturaleza interna reemplazará tu personalidad artificial, dejando aparecer la luz de tu corazón y el poder de la sabiduría del silencio. Gracias a esta fuerza atraerás hacia ti todo lo que necesitas para realizarte y liberarte completamente. Pero hay que tener cuidado de que el ego no se inmiscuya. El poder permanece cuando el ego se queda tranquilo y en silencio. Si tu ego se impone y abusa de este poder, el mismo poder se convertirá en un veneno, y todo tu ser se envenenará rápidamente.

Quédate en silencio, cultiva tu propio poder interno. Respeta la vida de los demás y de todo lo que existe en el mundo. No trates de forzar, manipular y controlar a los otros. Conviértete en tu propio maestro y deja a los demás ser lo que son, o lo que tienen la capacidad de ser. Dicho en otras palabras, vive siguiendo la vida sagrada del Tao.

sábado, 9 de abril de 2011

habla simplemente cuando sea necesario




Habla simplemente cuando sea necesario. Piensa lo que vas a decir antes de abrir la boca. Sé breve y preciso ya que cada vez que dejas salir una palabra por la boca, dejas salir al mismo tiempo una parte de tu chi. De esta manera aprenderás a desarrollar el arte de hablar sin perder energía. Nunca hagas promesas que no puedas cumplir. No te quejes y no utilices en tu vocabulario palabras que proyecten imágenes negativas porque se producirá alrededor de ti todo lo que has fabricado con tus palabras cargadas de chi.

Si no tienes nada bueno, verdadero y útil, es mejor quedarse callado y no decir nada. Aprende a ser como un espejo, escucha y refleja la energía. El universo mismo es el mejor ejemplo de un espejo que la naturaleza nos ha dado porque el universo acepta sin condiciones nuestros pensamientos, nuestras emociones, nuestras palabras, nuestras acciones y nos envía el reflejo de nuestra propia energía bajo la forma de las diferentes circunstancias que se presentan en nuestra vida.

Si te identificas con el éxito, tendrás éxito. Si te identificas con el fracaso, tendrás fracasos. Así podemos observar que las circunstancias que vivimos son simplemente manifestaciones externas del contenido de nuestra habladuría interna. Aprende a ser como el universo, escuchando y reflejando la energía sin emociones densas y sin prejuicios, siendo como un espejo sin emociones aprendemos a hablar de otra manera. Con el mental tranquilo y en silencio, sin darle oportunidad de imponerse con sus opiniones personales y evitando que tenga reacciones emocionales excesivas, simplemente permite que una comunicación sincera y fluida exista. No te dés mucha importancia, sé humilde pues cuanto más te muestras superior, inteligente y prepotente, más te vuelves prisionero de tu propia imagen y vives en un mundo de tensión e ilusiones.

viernes, 8 de abril de 2011

un día yo no existía




Un día yo no existía y Dios pensó en mí y resolvió que yo era una persona muy importante, por eso yo debía existir. A partir de este momento, yo nací del Espíritu Creador de Dios, como manifestación de su amor. Mi espíritu procede del Espíritu de Dios y, por eso, Dios está dentro de mí, me ama, me guía y vela por mí. Eso es maravilloso. Dios es amor infinito, por eso yo tengo amor dentro de mí. Dios es poder infinito, por eso tengo poder dentro de mí. Dios es perfección infinita, por eso tengo a la salud y ala fuerza curadora de Dios que me recupera la salud. Dios es la suprema felicidad, por eso tengo la felicidad dentro de mí.
Nada más me perturba, nadie más me puede perjudicar, porque yo y Dios somos UNO.
No tengo más miedo a la enfermedad, ni a la vejez, ni al abandono, ni a la muerte, ni a la incomprensión, porque yo y Dios somos UNO.
Sé que Dios está en mí y atiende con cariño y amor todos mis deseos; eso me infunde paz y tranquilidad.
Me perdono a mí misma por los errores y pensamientos negativos; perdono a los demás y soy perdonada por Dios. Sé que Dios siempre perdona y nunca castiga a nadie, porque Él es el supremo amor y la suprema misericordia; es la gente la que se castiga a sí misma, cuando las cosas no van bien o cuando no se piensa positivamente y no se confía en Dios, porque eso genera angustia y las angustias y los miedos generan los males físicos y mentales.
Ahora he aprendido a confiar en Dios y en mí misma, porque Dios está en mí.
Soy una persona alegre, saludable, segura, agradable, llena de bondad y buena voluntad. Amo a mi marido, amo a mis hijos, amo ala familia de ellos y los coloco en las manos y en la protección de Dios. Ellos me aman y nosotros formamos una familia unida, que se quiere bien.
Mi vida está cada día mejor y mejor en todos los sentidos.
Duermo tranquila y en paz, entrego mi sueño a Dios y despierto a la mañana bien dispuesta, saludable, llena de energías, alegre y sonriente.
Sé que es dando como se recibe. Distribuiré sonrisas y salutaciones a todos y tengo la certeza de que mi corazón se llenará de sonrisas y de alegría. Aunque al comienzo no sienta la voluntad de ayudar a los demás, de sonreír, sé que Dios está en mí dándome fuerzas y recompensándome. Por la ley de la compensación, sé que Dios siempre me recompensa. Por la ley de que "yo cosecho lo que siembro", sé que recogeré la alegría, las sonrisas, las buenas palabras, la paciencia, la tolerancia, la buena voluntad y la simplicidad que yo, desde ahora, comienzo a sembrar en los otros.
Ahora soy otra persona. Ya estoy fuerte y llena de salud; puedo ayudar a los demás, estoy dispuesta a dar la mano a las personas necesitadas. Sólo sembraré pensamientos positivos y saludables porque es eso lo que quiero que los míos recojan.
Nunca hablaré de enfermedades, miedos ni temores, porque no existen enfermedades, miedos ni temores en nuestra casa, pues Dios está en cada uno, Dios todo lo puede y es nuestra fuerza.
Agradezco y bendigo, de hoy en más, a la vida. Ella es el más bello obsequio de Dios.
Agradezco a mi marido, que es maravilloso; agradezco a mis hijos; agradezco a todas las personas con las cuales me encontraré hoy.
Todo me va bien.
Soy una persona maravillosa. Me acepto a mí misma y agrado a todas las personas.

Muchas gracias. Muchas gracias. Muchas gracias.

jueves, 7 de abril de 2011

sabiduría



Los labios de la sabiduría permanecen cerrados,
excepto para el oído preparado para comprender.



miércoles, 6 de abril de 2011

hadas



Salgan Hadas de su morada,

venid en esta Hora Dorada

venid a mi presencia de prisa

Hadas bailando en la Brisa.



martes, 5 de abril de 2011

ésta es tu vida



Ésta es tu vida. Haz lo que amas, y hazlo a menudo. Si no te gusta algo, cámbialo. Si no te gusta tu trabajo, déjalo. Si no tienes demasiado tiempo, deja de ver tele. Si estás buscando el amor de tu vida, detente; estará esperando por ti cuando empieces a hacer las cosas que amas. Para de analizar, la vida es simple. Todas las emociones son hermosas. Cuando comes, aprecia cada bocado. Abre tu mente, tus brazos y tu corazón a cosas nuevas y gente nueva, estamos unidos en nuestras diferencias. Pregúntale a la persona de al lado cuál es su pasión, y comparte tu sueño inspirador con ella. Viaja con frecuencia. Perderte te ayudará a encontrarte a tí mismo. Algunas oportunidades vienen sólo una vez, aprovéchalas. La vida es sobre gente que conoces, y las cosas que creas con ellas, así que sal afuera y empieza a crear. La vida es corta. Vive tu sueño. Y hazlo con pasión.

lunes, 4 de abril de 2011

experiencia mágica



Los libros proponen a simple vista una actividad intelectual,
que podemos transformar en una experiencia mágica.



domingo, 3 de abril de 2011

los libros


Los libros que más te gustan,
son los que cuentan cosas que ya sabías.



sábado, 2 de abril de 2011

esto es todo lo que tengo que hacer para encontrar la solución




Como usar un vaso de agua en la solución de problemas.
Cuando estés dispuesto para irte a dormir, selecciona cualquier problema que te gustaría resolver, después toma un vaso y llénalo de agua.
Mientras estas tomando, aproximadamente, la mitad del agua, eleva tus ojos ligeramente hacia arriba y mentalmente repite: “esto es todo lo que tengo que hacer para encontrar la solución del problema que tengo en mente”.
Después guardas el resto del vaso de agua para tomarlo precisamente al despertar. Entonces te acuestas y te duermes.
Al despertar por la mañana, toma el resto del agua, poniendo tus ojos en la posición de pantalla mental (mirada al frente ligeramente hacia arriba), diciéndote: “esto es todo lo que tengo que hacer para encontrar la solución al problema que tengo en mente. Y así será”
Los resultados de esta programación podrán venir a ti de diferentes maneras: durante la noche o en la mañana, con un recuerdo vivido de un sueño que contenga información que necesites para resolver tu problema, o durante el día con una idea que contenga la información que puedes usar para resolver tu problema.

viernes, 1 de abril de 2011

el cristal



El cristal es un ser vivo que vibra más rápido que la velocidad de la luz. No es un sólido. Es un sonido, es éter materializado. El cristal es un ser consciente de quien asumió una forma específica para resonar el sonido básico de la Creación. Con el cristal, se puede caminar en todas las direcciones.


Dhyani Ywahoo.
Voz de los Ancestros.
Enseñanzas Cherokee sobre el Fuego de la Sabiduría.